Un artículo anterior de este Blog concluyó de forma coincidente

La existencia de los cambios climáticos en el Planeta, es una evidencia que nadie niega y que es consecuencia inherente del carácter dinámico del Universo y de manera particular del Sistema Solar y de la propia Tierra. 

Ningún científico puede negar sin embargo la insignificante influencia del hombre sobre el cambio climático; así lo prueban (entre otras evidencias),  las referencias a catástrofes semejantes a la ocurrida anteayer en los territorios de Levante, que nos llegan desde hace varios siglos y de forma repetida. Nadie puede argumentar que en tales épocas la industrialización o la intervención humana, fuera responsable de tales sucesos. ¿Nadie? Sí, hay algunos que llevados por una ideología carente de crítica y de conocimientos suficientes, sostienen lo contrario, manipulados por entidades mercantiles que se aprovechan para aumentar nuestros impuestos (robarnos), e incluso hacer que trabajemos para ellos y su beneficio reclasificando los residuos (es un mero ejemplo de mulitiud de medidas impuestas por falsos gobiernos progresistas con la bendición de una gran parte de los políticos europeos), previa culpabilización y generación de alarmas falsas, que luego aprovechan sin recato alguno.

Lo dicho adquiere significación y actualidad si se revisan las declaraciones del Gobierno y de los medios inconfesablemente afines a la mentira y la tergiversación, en cuanto a la existencia de eventuales responsabilidades, por la omisión de información y medidas de alerta que pueden estar tras las consecuencias mortales de la Gota Fría de anteayer (más de 90 muertos por el momento).

Por todas las citas ver: Interior se descarga de responsabilidad: Protección Civil es responsabilidad exclusiva de las Comunidades. y no es de menor interés la portada de El País de 31/10/2024 que viene a decir sin sonrojo alguno: La Generalidad envió la alerta 8 horas después de desbordarse los barrancos

El Gobierno desplaza las responsabilidades hacia la Administración Autonómica arguyendo torticeramente (al más puro estilo "SANCHISTA"),  que las competencias son autonómicas en cuanto a la prevención y procedimientos a tomar en casos de crisis.

Probablemente, se trata de evitar que se reproduzca el descubrimiento de la impúdica actuación del Gobierno durante la epidemia del Covid, en la que se llegó primero a negar la evidencia, después a arrestar a los ciudadanos en sus domicilios pasando por el invento del entonces  Ministro de Sanidad Illa (o pesadilla), de una comisión de crisis inexistente... pero de eso ya nadie se acuerda, o al menos, hay muchos a los que no les conviene recordar.

Claro que existen competencias autonómicas y, desde luego que la responsabilidad si la hubiere en la parte que le corresponda debería asumirse por el Gobierno Valenciano. En su bajeza el Gobierno al derivar las responsabilidades acomete ideológicamente contra el PP, cómo si eso fuera a resolver el problema: sea de unos u otros, la responsabilidad existe de igual forma e implica a toda la estirpe política (dicho sea lo de estirpe en el sentido de familia mafiosa y con la peor intención de denostarla por mi parte).

Lo que no se puede ocultar, a riesgo de violar la Ley, es que la competencia esencial en materia de Seguridad Nacional es del Gobierno. Transcribo a continuación un par de fragmentos ilustrativos (sin más comentarios) de los artículos 20 y 21 de la Ley 36/2015, de 28 de septiembre, de Seguridad Nacional:

"Artículo 20. Estructura del Sistema de Seguridad Nacional.

1. El Presidente del Gobierno dirige el Sistema asistido por el Consejo de Seguridad Nacional...

Artículo 21. Funciones y composición del Consejo de Seguridad Nacional.

1. Corresponde al Consejo de Seguridad Nacional ejercer las siguientes funciones:
a) Dictar las directrices necesarias en materia de planificación y coordinación de la política de Seguridad Nacional.
b) Dirigir y coordinar las actuaciones de gestión de situaciones de crisis en los términos previstos en el título III".

Claro que para este Gobierno, caracterizado por sustentarse en la mentira y la autocracia, la Ley sólo debe aplicarse en el sentido en que sus miembros decidan según sus bastardos intereses (véase caso Ábalos o ERTES andaluces), y si no es así, para remediarlo tienen secuestrado a un Tribunal Constitucional que ha perdido todo su caracter de Tribunal de Garantías, al entregarse por todos los partidos (principal responsable el PP), a las manos de personas parciales, sin capacidad de independencia e ideológicamente perdidas e inicuas. (Léase Conde-Pumpido y secuaces).

Ya falta nada más que secuestrar a la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo y Sánchez habrá culminado el montaje de su dictadura, y además dejará de preocuparse por el Juez Peinado o la investigación sobre el Fiscal General del Estado.

Va siendo hora de despojar a estos individuos de su careta elaborada merced a sobornos de minorías radicales sin representación significativa y con ideologías inanes de cultura, honradez y bondad.

No cabe duda de que vivimos un tiempo aciago, pagando las consecuencias de la ocupación autoritaria del poder por personajes sin legitimación - estos parásitos incultos que gobiernan, nunca ganaron unas elecciones generales y mantienen una rala representación autonómica -.

Detrás de esto sin embargo solo cabe concluir que hasta que no exista una seria reacción popular, tenemos lo que nos merecemos.

P.D. No olvidemos la portada de El Mundo Deportivo: El partido Valencia-Real Madrid, no podrá jugarse. ¡Esto si que es una catástrofe! Qué pena de alienación brutal y circense.